Los mayores.

He conocido a una chica mayor en la biblioteca que me ha hablado sobre la realidad, al principio me ha dicho que me tiene mucha envidia porque los niños somos las personas mas inocentes del mundo, y que daría cualquier cosa por volver a ser una niña.
Estaba sentada en la mesa más cercana a la ventana y escribía una carta, pero me ha dicho que soy demasiado pequeña para entenderla, porque habla de cosas de mayores. Dice que escribe lo que siente en un papel para desahogarse. Que diferentes son las personas, mamá para desahogarse se ha apuntado a yoga.
Cuando ha terminado me ha dado su carta, y me ha pedido que la guarde y que la lea cuando sea mayor, para que no cometa los mismos errores que ella.

Aquí estoy una vez más, escribiendo mis penas, ahogándolas en este licor de palabras, de oraciones que ayer no tenían sentido. Desearía poder gritarlas mirando al cielo, y que el mundo acabara aquí, pero entonces sería demasiado cobarde…
Me encantaría salir ahí fuera y ser capaz de reírme como ayer, desearía poder envolver este maldito corazón, y dejarle sentir solo cuando se sintiera querido. Podría quedarme ciega, y no ver al amor acercarse y alejarse, dejar de considerar amor a las mariposas de mi estómago, tener respuesta para todo y no rendirme con las sonrisas.
Podría luchar contra las mentiras, y matar a las falsas esperanzas, tener el valor despierto y soñar solo cuando estoy durmiendo.
Eliminaría las estaciones de tren con sus despedidas, borraría todas tus miradas, apartaría de mi los fracasos y secaría todas las lágrimas.
Insonorizaría el mundo para no escuchar el eco de tu voz que tanto resuena en mis oídos, rompería ese espejo que me ve llorar, que me encuentra sola, sin besos, sin abrazos…ahora mi sombra huye despavorida porque se siente vacía sin ti, a pesar de que nunca has estado.
Todos tenemos tantas caras…el yo que siento, el que muestro, el que ven los demás y ahora es cuando me doy cuenta, de que en todas estabas tú.
Desearía soplar tan solo 5 velas, y no saber de la existencia de los sentimientos, confundir una fórmula química y hacerlo todo estallar.
Quizás he deseado tanto la luna, que jamás encontraré su luz, y por eso hoy está todo tan oscuro, a lo mejor en un mañana aparezca un vendedor ambulante que venda lienzos sobre los que pintar… mientras tanto solo me queda respirar, eso siempre está conmigo.
-Quizás no soy tan lista como Romeo dice.